Cuando los instagramers se cansan de posar, los amantes del arte de ver todos los perfiles del David de Miguel Ángel, y enamorarse de la Venus de Botticelli, Florencia traslada los focos cerveceros a los templos de birra artesana. Entre ellos Archea Brewery se podría considerar la Santa María del Fiore, el Duomo craftbeer florentino.
Al sur del Arno, en Oltrarno, entre los barrios de Santo Spirito y San Frediano, las noches serían tan tranquilas como los salones apagados del Palazzo Pitti si no fuera por la llamada de brewpubs como el Archea Brewery.
Archea fue la primera cervecería florentina en pinchar una selección de las mejores cervezas artesanales (incluidas las que tienen su propia marca) en Florencia. Tres socios y amigos, Antony, Carmine y Giulio, bregan en la Toscana -una tierra tradicionalmente de vinos- por la difusión de la cerveza artesana en Florencia. Cuando abrieron Archea en 2012, abriendo el escenario de la craftbeer en la ciudad no imaginaban que detrás de ellos nuevas cervecerías seguirían su camino.
A golpe de buena música sus parroquianos acuden a la tradición. Esta noche que acudimos a conocer la cervecería nos reciben Carmine y Giulio. Junto a ellos dos insignes clásicos que tienen casi taburete con su nombre son Francesco Ranzani, profesor, juez en competiciones nacionales, organizador de eventos, y colaborador de Slow Food de la guía Birre d’Italia; y el simpático cantautor calabrés Peppe Voltarelli. Los dos nos hacen de cicerones del panorama de la cerveza artesana en Florencia.
Hablamos de la grape Ale de Bruton que conocimos en el Innovation Beer Festival de Leuven, y ellos nos van instruyendo acerca de las cervezas artesanales que van consolidando a Italia como un gran destino cervecero.
Los 16 grifos -14 tradicionales y dos bombas inglesas – abastecen a florentinos, universitarios de toda Italia y a extranjeros que llegan sabiendo lo que se van a encontrar, quizá porque alguien ya les ha hablado bien. Bajamos con Giulio a la bodega, con preciosos techos de arcos apuntados.
Carmine Peluso y Antony Petti son originarios de Campobasso mientras que Giulio Gori es de Montespertoli (provincia de Florencia). Componen un trío curioso. Carmine estudió arqueología, Giulio biología y Antony Derecho. Amantes de la birra artesanal, se conocieron en la universidad y dieron el salto del hombrewer haciendo su primera cerveza como nómadas en la Cervecería Sannita en (provincia de Campobasso, región de Molise,) y más recientemente en la Cervecería Lariano en Sirone (provincia de Lecco, región de Lombardía). El nombre Archea fue una sugerencia de la madre de Carmine.
En la Pizarra encontramos cervezas de Lariano, Foglie d’Erba, Hilltop, entre otras muchas. Además de las cervezas que rotan en los grifos, manejan un centenar de botellas de cervezas artesanas. Nosotros nos decantamos por Hydra ,la IPA de la casa, que junto a Melyssa la Hoppy Honey Golden Ale son dos de las cervezas que tienen ahora pinchadas. La Hoppy Honey equilibra su dulce sabor de miel de naranja con los lúpulos Cascade, Simcoe y Centennial; mientras que la Archea IPA presenta un sabor ácido a limón o lima muy refrescante. La primera que hicieron fue una Bock (Archea Bock) y más tarde Black Tower (Black IPA).
Para complementar la cata de cervezas italianas en Archea Brewery podemos acercarnos al restaurante Pint of View, un proyecto también «cocinado» por ellos. Es un lugar donde la pasión por la cerveza y los cocktails se encuentra con la pasión por la comida. Un lugar informal cerca de la espléndida Piazza di Santo Spirito donde simplemente puede detenerse para tomar una copa o disfrutar de sus cervezas con los platos de la cocina.
MAPA DE ARCHEA BREWERY
Archea Brewery está en via De’Serragli 44/r, en el barrio de Oltrarno.
Horario: 18h. – 1h. (Los viernes y sábado abre hasta las 2h am)